Mi familia y Yo en los ultimos munitos de este año 2010 que ya termina; un año en que seguro que has vivido buenos y malos momentos personales, familiares y profesionales.
Me atrevería a decir, que para muchos y muchas de vosotros/as no ha sido el mejor de los años por culpa de la crisis y sus repercusiones, seguro que muchos y muchas de vosotras/os la estáis sufriendo directa o indirectamente.CLICA AQUI
Nada hace pensar que el 2011 vaya a ser mejor que el 2010, pero tampoco debe ser necesariamente peor.
¿Por qué no hacemos del 2011 el año del Cambio en Badia? ¿el año de la igualdad y la justicia social, sin amiguísmos?.
¿Por qué no hacemos que sean menos familias las que sufran la crisis? ¿Y por qué no hacemos que en el 2011 sea posible el cambio con diálogo y respeto a la diversidad y a la pluralidad? Y por qué no?
Estoy seguro de que con nuestro esfuerzo cotidiano, la implicación y participacion de todas/os el cambio es posible en el 2011: YES WE CAM.
Ánimos a todos/as y Feliz 2011!.
Uno de los argumentos que autores conservadores han utilizado para negar el carácter fascista del régimen dictatorial establecido por el golpe militar liderado por el general Franco ha sido afirmar que la ideología de aquel régimen no incluía un componente racista, tal como ocurrió con el nazismo alemán y el fascismo italiano. La evidencia existente y fácilmente accesible muestra, sin embargo, la escasa credibilidad de tal argumento. El eje ideológico de aquel régimen fue el nacional-catolicismo que conjugó dos ideologías: el nacionalismo hispánico, que llegó incluso a negar la existencia de otras nacionalidades (como la catalana, la vasca, y la gallega), imponiendo su visión centralista uniformadora, y un catolicismo excluyente que intentó configurar todas las dimensiones del ser humano, incluyendo áreas tan íntimas como el comportamiento sexual de la ciudadanía.
